Durañona y Giacomantone firman el acuerdo. Foto: Gentileza ARPA

El deterioro de las rutas es muy grande y afecta el transporte de granos, leche y vacunos

Resulta demasiado contrastante la situación de Areco comparada con la que se vive desde hace años en más del 50 por ciento de la provincia de Buenos Aires, en donde los caminos rurales son prácticamente intransitables.

Pocos como Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), conocen a fondo el flagelo: «Indudablemente la provincia de Buenos Aires sufre un deterioro muy fuerte de su red de rutas provinciales asfaltadas; pero después de 2014, con la cantidad de agua caída, tanto la red provincial como vecinal de caminos de tierra han tenido daños importantísimos; se han formado grandes pozos que impiden su transitabilidad; literalmente, en muchos casos estos caminos han desaparecido».

Al referirse a la Dirección de Hidráulica, el dirigente señaló: «Ha quedado en un limbo entre lo que es el Ministerio de Infraestructura y la Autoridad del Agua, que hace que muchos profesionales de la repartición no se encuentren en el interior de la provincia y que no cuenten ni con elementos de transporte ni viáticos que les permitan realizar sus funciones. Esto claramente derivó en que se hagan canales, cuneteos y alteos de caminos sin las previsiones técnicas necesarias.»

A este relevamiento y evaluación hecha desde Carbap se conformó una comisión especial para su estudio, a cargo del presidente de la Sociedad Rural de Pigüé, Roberto Cittadini. En ese contexto, el 8 de enero pasado Carbap realizó en Coronel Brandsen una reunión con 20 entidades rurales de distintas zonas para exigir la inmediata atención de la infraestructura de caminos, aprovechando la temporada de verano, más favorable para realizar los trabajos.

«Asimismo, desde los Ateneos de Carbap -informó su presidente- comenzaremos a realizar una visibilización de la problemática a través de las redes sociales con el hashtag #caminosrurales, tal como se realizó con éxito el año pasado para mostrar la situación de intransitabilidad que tienen los caminos Debemos agregar el concepto claro de que esta situación de deterioro vial excede el marco municipal y debe tener una respuesta también de carácter provincial.»

Atento a esto y en busca de una solución a mitad de 2014 hubo una reunión con el ministro de Asuntos Agrarios, Alejandro «Topo» Rodríguez y el ministro de Infraestructura, Alejandro Arlía: «Allí se nos informó que se iba a realizar un plan de 200 millones de pesos para la construcción de caminos rurales, cuestión que hasta hoy no sólo no hemos recibido más información, sino que no hemos visto ninguna actividad al respecto. Pero todo esto también tiene como corolario la aplicación de los fondos que se hacen de la tasa que se cobra, los cuales en muchos distritos de la provincia de Buenos Aires son derivados a la atención de otros gastos municipales y no estrictamente a la prestación de este servicio», dijo Salaverri.

Y a esto agregó el dirigente que existen otros fondos provenientes de la ley 13.010, que prevé que el 25 por ciento de lo cobrado en la descentralización del impuesto inmobiliario rural sea aplicado al mantenimiento de caminos, «cuestión que se ha percibido que en la mayoría de los casos no ha ocurrido e ingresa a rentas generales desviándose su uso», aclaró.

Para Salaverri, los caminos rurales son las verdaderas arterias del sector agropecuario. «Si este concepto no es tenido en cuenta por las autoridades, el deterioro va a generar una pérdida económica a niveles municipales, provinciales y nacionales. Urge la necesidad de la creación de elementos financieros locales o internacionales que permitan una fuerte inversión estatal en las redes viales provinciales y en los caminos vecinales rurales», concluyó.

Tasas muy elevadas

En algunos distritos son desproporcionadas

En 100 distritos de la provincia de Buenos Aires (menos Bahía Blanca) se cobra la tasa de mantenimiento de la red vial generalmente por la cantidad de hectáreas del establecimeinto. En los pequeños centros urbanos, esta tasa constituye un porcentaje muy alto de los recursos propios del municipio.

La diferencia en dos formas de administrar

«En la prestación municipal ha caído el nivel técnico, en muchos casos sin profesionales idóneos »

«Hoy el productor de Areco presenta su reclamo a la municipalidad y éste es trasladado a ARPA».