En el mediodía del jueves el intendente Francisco Durañona, el Secretario Luis Lupini y el director de la obra Aliviadores Puente Viejo, recorrieron la misma y explicaron el avance, asegurando que solo faltan uniones de la senda peatonal de acceso al puente, reubicación del tubo que trae agua desde los pozos de extracción del Parque Criollo, la ampliación del cauce que llegará hasta el edificio de la margen izquierda, habitualmente proveeduría, que obligará a la extracción de añosos árboles o a su eventual transplante.

Se estima que la finalización de esta obra ocurrirá hacia abril del corriente año quedando por resolver otras cuestiones como la reubicación de las compuertas o su reemplazo por otras de mejor tecnología, manifestando que con la nueva construcción el puente tendrá un paso de agua del orden de los40 metros.

Evidentemente la obra es importante y se espera que dé solución a las inundaciones como las producidas últimamente que, con lluvias no demasiado abundantes, desbordó de su cauce  con zozobra para los vecinos ribereños.

Se sostiene que la obra es complementaria de otras como lo aliviadores del Puente Gabino Tapia y el de Ruta 41 que, a la luz de los últimos acontecimientos hídricos, no han dado solución total al problema del río Areco.

No obstante se nota en los funcionarios y en los ejecutores de la obra, optimismo respecto a su funcionamiento final.