La UTA anunció un paro de micros de larga distancia en pleno recambio turístico

 

Se concretará el 1, 2 y 3 de febrero en caso de no existir acuerdo de un adelanto salarial. Desde la cámara empresarial aseguran que el sector «está en crisis». Capitanich confirmó que habrá una audiencia el miércoles

Una huelga podría agüarle la fiesta a los miles de veraneantes que utilizarán el servicio de micros de larga distancia en el comienzo de febrero. El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, ratificó ayer un paro para los días 1, 2 y 3 de febrero en caso de no haber acuerdo con el sector empresarial.
«Estamos preocupados, estamos trabajando en las medidas que podamos tomar el 1, 2 y 3 porque no hemos encontrado ninguna solución. Hace un mes que venimos conversando, pero no hay ningún adelanto sobre lo que estamos pidiendo nosotros», dijo Fernández, en declaraciones a radio El Mundo.
Los choferes piden 2.000 pesos de anticipo a cuenta del aumento que consigan en el convenio paritario y que el monto de los viáticos se eleve a 500 pesos.
El diálogo entre las partes está empantanado. Mientras los trabajadores presionan por la pérdida del poder de compra del salario en los últimos meses -a raíz de la devaluación e inflación aceleradas-, los empresarios quieren sujetar los futuros incrementos a la mejora de la rentabilidad de una actividad que, advierten, «está en crisis».
«Llegamos a un escenario que detrás de la negociación salarial está la crisis de un sector que emplea a más de 22 mil personas y no se puede resolver. Lamentablemente, del año pasado a hoy seguimos en la misma situación y esto (por el adelanto) aumentaría el déficit de las empresas», señaló Gustavo Gaona, vocero de la cámara de micros de larga distancia.
De un tiempo a esta parte que la actividad está golpeada estructuralmente. Son varias las causas. Por un lado, la quita de la asistencia económica decidida por el Gobierno a comienzo de 2012, la competencia con Aerolíneas Argentinas -conspiran la rapidez de los vuelos y el bajo costo de los pasajes-, y el aumento del «transporte trucho» que denunciaron oportunamente los empresarios.
Para enfrentar los aumentos salariales, la cámara descarta la posibilidad de una suba de subsidios, ya que el Gobierno lo rechazaría, aunque sugieren otras alternativas, como «un control más fuerte del transporte o separar las bandas tarifarias del ómnibus con el avión».
El escenario es poco alentador. El año pasado, la paritaria se extendió durante 9 meses y hubo medidas de fuerza «históricas» que llegaron a extenderse por cinco días. Inclusive, el Ministerio de Trabajo debió interceder y «bajar» un aumento ante la falta de acuerdo salarial que luego a las empresas se les complicó acatar.
Pese a los antecedentes, el sector patronal aseguró que «se reunirán las veces que sea necesario» para «evitar un paro a toda costa». «La fecha es muy sensible y nos parece que hay que evitar el paro a toda costa. Es al usuario a quien tenemos que proteger, a quien tenemos que tener arriba del micro y no abajo esperando que lleguen», expresaron esta mañana en radio La Red
Pero Gaona advirtió: «Queremos ser sinceros. Hasta ahora no le hemos encontrado solución«. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, confirmó esta mañana que la cartera laboral convocará este miércoles a los empresarios del transporte de media y larga distancia con el objetivo de «solucionar el conflicto» que mantienen con los choferes. En tanto, a las 17 habrá una nueva audiencia, donde se retomarán las negociaciones en la cartera laboral. No se descarta que se dicte la conciliación obligatoria.
 InfoBae