En la elección interna de la Unión Cívica Radical a desarrollarse el próximo domingo 7 de septiembre, la Lista 2015- que en el orden local lleva el número 100-, estaría ganando en San Antonio de Arecoi según encuestas de mediana cantidad de consultas entre el electorado que participará en la contienda.

Si bien estos datos siempre son relativos, el detonante de este supuesto voto contra la  actual conducción es, sin lugar a dudas, en primer lugar los magros resultados obtenidos en las últimas elecciones coronados lamentablemente con los de la PASO 2013 y Generales del 27 de octubre con tan solo 2.300 votos que le valieron apenas la incorporación de un solo concejal-la señora Gabriela Morrow-, a lo que se suma la rara actitud de votar junto al oficialismo la última Ordenanza Fiscal e Impositiva que produjo importantes aumentos en las tasas, en algunos casos desmesurados.

La Lista 2015, aprovechó esta falencia partidaria ahondando en la falta de un perfil político definido, opositor, que por momentos se mostró dubitativo e inconsulto,  basándose más en decisiones que aparecen como propias de cada edil y no resultado de un debate en el comité y mucho menos con la masa de afiliados, mientras la contrincante  desarrolló una campaña coherente, sumamente crítica para adentro y afuera del partido, incorporando personas de ambos sexos de profunda raigambre radical, con experiencia política,  ideales para un momento difícil en que hacen falta esas cualidades ara tratar e enderezar un rumbo que aparece errático.

Prueba de la disconformidad del electorado fue la concentración realizada en la plaza Ruiz de Arellano a pocos días de la aprobación conjunta entre oficialismo y alianza UCR-GEN, de los mencionados aumentos en las tasas y la incorporación de otras.

Desde los integrantes de la lista 2015 muestran una gran tranquilidad y son remisos a aceptar pronósticos triunfalistas manifestando que para ellos el triunfo ya se dio al lograr, en solo pocos meses, volver a poner en movimiento el partido tras un inmovilismo reinante desde hace años.

Por otra parte consideran que la lista 127 que encabeza la señora María Dolores Fernández es la continuidad de la anterior cuestionada conducción que, en su campaña, no ofreció ninguna posibilidad de cambios; eo sí, los de la 2015 saben que deberán luchar el domingo 7 con algunas estructura- los denominados “aparatos”-, liderados por algunos dirigentes de antigua notoriedad y que, desde las sombras, movilizan algún grupo de afiliados que pueden sumar a la hora del escrutinio.

Se considera que esos son los resabios de la vieja política de los obedientes punteros que, aunque nieguen ser liderados por alguien, estos aparecen en las listas y, tras cambiar de espacios políticos recalan en el radicalismo, quizás como un paso previo hacia otro destino más prometedor que el castigado partido de Alem, Yrigoyen, Balbín, Illia y Raúl Alfonsín.

Quienes integran la Lista 2015 proponen, además, actividades dentro del comité que sirvan de apoyo escolar para quienes no pueden pagar una maestra particular, asesoramientos, jurídico de orientación a través de abogados partidarios, jubilatorio para quienes estén en condiciones de iniciarlos, crediticio para aprovechar los disponibles  para jubilados, gestiones de reclamos por tarifas u otros, y reuniones periódicas para mantener a la Casa Radical en continuo movimiento.

Por otra parte insisten en que el afiliado concurra a votar como una manera de  elegir por su propia convicción y no ante la imposición de unos pocos de los que desde años surgen arreglos o  descalificaciones desde una Junta Electoral adicta y no en una contienda electoral como la que se vivirá el domingo.

A tal punto llega el estado de ánimo de la lista encabezada por Raúl Luraghi, Victor Hugo Ruiz, Brunhilda Buizetti, “Michel” Mercante, Fernando Fagnani, Clotilde Coppa, Marta Amas y Marcelo Miranda entre otros, que en el programa televisivo “Seamos Claros” festejaron el hecho de haber llegado a esta instancia democrática con música y mucha alegría.

Se desentienden del resultado-, aunque está claro que desean triunfar y los alientan las encuestas-, para sostener que lograr movilizar al partido y participar en una elección partidaria es suficiente motivo para estar contentos.