Histórico: Perdidas masivas de producción en la región núcleo

Las lluvias no llegan y las pérdidas productivas cada vez son mayores.

En soja el recorte es de casi 4 millones de toneladas respecto a un mes atrás. Inédito: hay un millón de hectáreas perdidas y el rinde promedio pasó de 24 a 18,2 quintales por hectárea debido a la falta de precipitaciones y 9 olas de calor. Febrero desmoronó también al maíz tardío: el rinde promedio pasó de 72 a 48 quintales.

En la región núcleo, con un escenario normal de clima, se esperaban producir 19,7 millones de toneladas de soja. El 9 de febrero la estimación bajó a 10,4 millones. Y hoy se estima que serán solo 6,5 millones de toneladas. Lamentablemente no hay lluvias a la vista que permitan ponerle un piso definitivo a la cosecha. La situación es muy grave y puede aún empeorar más. Por el momento, se estima que la cosecha solo será el 33% de lo que se esperaba a principios del ciclo. Respecto al año pasado, que se consideraba la peor campaña desde el 2008/2009 con 13,5 millones de toneladas, el ciclo 2022/2023 dejaría incluso solo la mitad de ese volumen de soja.

Cifras inéditas

«En más de 45 años de profesión nunca viví una campaña productiva tan desastrosa y dañina para las empresas agropecuarias», dice un ingeniero de Bigand. Las condiciones extremas de febrero configuraron una pesadilla inimaginable para el productor de la zona núcleo.

Según datos del siguiente informe de la Guía Estratégica para el Agro, de la Bolsa de Comercio de Rosario, por la falta de agua se dejaron de controlar casi generalizadamente malezas y plagas en los lotes de soja de segunda y en los sembrados sin cultivo antecesor (de primera), que por la falta de humedad no se pudieron sembrar hasta los últimos 10 días de enero.

Muchos refieren que la producción en esos casos será cero. Ya se estima que uno de 4,6 lotes de soja sembrados no será cosechado, pero la relación puede crecer drásticamente si no llueve en los próximos 10 días. Este es un nivel de pérdidas histórico para la región del que no se tiene registro. En los últimos 15 años, la última campaña con el mayor nivel de perdidas fue la 2016/2017 con casi 400.000 hectáreas.

En General pinto explican cómo se da la caída de la condición en los cuadros de soja: «En 3 días se da un cambio drástico al quedarse el suelo vacío y la raíz sin humedad. Es un momento de caída abrupta con condiciones ambientales brutales entre la falta de agua y máximas de 38 a 40° C. Aparte, en soja de primera estamos transitando el momento crítico en las peores condiciones imaginables. El deterioro que vemos no tiene precedente».

Este es otro de los factores que explica cómo cayeron los rendimientos estimados. De los 24 qq/ha que se esperaban en soja (de primera y segunda) a principios de febrero como promedio de la región, ahora el guarismo se actualiza en 18,2 qq/ha. Este rinde está debajo en 5,7 qq/ha del peor rinde que se tenía registrado, el del 2008/2009.

Maíz de segunda y tardío

En 15 días se perdieron 119.000 hectáreas entre maíz de segunda y tardío: pasamos de 81.000 a 200.000 hectáreas. Quedan en pie 969.800 hectáreas de las cuales el 50% está de regular y el 35% en malas condiciones. Los rendimientos también se han desplomado: a día de hoy se estiman 48 qq/ha de promedio vs los 72 quintales que se esperaban 30 días atrás.

En el centro-sur santafecino las pérdidas de área ascienden al 12%. Los maíces tardíos y de segunda están perdiendo hojas y comienza a retrasarse su desarrollo. Se observan pérdidas de plantas. Se estima entre 40 a 50 qq/ha. En el extremo sur santafecino las pérdidas son del 7%, la mitad de los cuadros que siguen en producción está en malas condiciones y estiman 40 a 70 qq/ha. En el noreste bonaerense las pérdidas son del 20% del área. El 70% de cultivo en pie está en malas condiciones y esperan 40 qq/ha promedio.

En el noroeste de Buenos Aires aun no acusan pérdidas pero el 80% del cultivo esta de regular a malo. Allí la proyección de rinde asciende a 60 qq/ha.

En el este cordobés las pérdidas son del 5%, hay un 20% en malas condiciones y un 40% regular, el rinde estimado es de 50 qq/ha.

En Pergamino y la zona

«La situación es totalmente irremontable», dicen desde Pergamino. «En el área comprendida entre el norte bonaerense y el sur santafesino se ha perdido la totalidad de los cultivos de soja y maíz de segunda. Rezamos para obtener entre 15 a 20 qq/ha en los lotes que siguen en carrera en soja de primera y entre 40 a 50 qq/ha en el maíz tardío. Los que siguen en carrera son los mejores lotes del área», aclaran los técnicos.

Altas temperaturas

Esta semana las temperaturas fueron elevadas, principalmente en la franja que abarca el este de Córdoba, sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires, donde los valores máximos oscilaron entre los 38° C y 39° C. El valor más alto se registró en Villegas, alcanzando los 39° C. Los registros fueron un poco más bajos hacia el sur y norte de esa franja, aunque sin dejar de ser elevados. Las mínimas presentaron una distribución geográfica uniforme, con un gradiente sudoeste/noreste. Los valores más bajos se ubicaron en la zona próxima a Villegas, en Buenos Aires, con registros en torno a los 10° C. Hacia el noreste, en las proximidades de Irigoyen en Santa Fe, los valores rondaron los 15° C. El valor más bajo, 10.4° C, se midió en General Pinto.

Con este panorama, principalmente debido a la falta de lluvias en gran parte del área núcleo, la humedad del suelo se sostiene de escasa a estado de sequía.

En los próximos quince días la zona que abarca Santa Fe, este de Córdoba y norte de Buenos Aires requiere entre 120 y 160 milímetros para alcanzar el nivel óptimo de humedad edáfica, mientras que el sector sudoeste de la zona núcleo necesita acumulados entre 80 y 100 milímetros para mejorar el estado de las reservas.