Los cooperativistas de Jujuy: «Si nos pasa algo, sabemos quién fue: Milagro Sala»

El presidente de una cooperativa contó que la líder de Tupac Amaru manejaba los municipios, la policía y la salud, y que frenaba la ayuda social a otras agrupaciones

MARTES 19 DE ENERO DE 2016 •

 

Las agrupaciones no alineadas a la Tupac Amaru, no recibían la ayuda social que solicitaban.Foto:Archivo

SAN SALVADOR DE JUJUY.- Hay cooperativistas a los que ya no les importa estar amenazados por Milagro Sala. La hasta ahora fructífera ofensiva del gobierno de Gerardo Morales para corromper la estructura de la organización barrial Tupac Amaru abrió una puerta a los trabajadores que hasta hace poco permanecían en silencio por miedo a las represalias que pudiera tener una dirigente social que acumuló en los últimos años un poder sin precedentes.

«Si nos pasa algo, sabemos quién fue: Milagro Sala», afirmó en diálogo con LA NACION Milton Urtado, presidente de la cooperativa «Larga vida a los que luchan», que cuenta con 500 afiliados.

Urtado nunca confió en Sala, detenida en la Comisaría Mujer Nº 49 de esta ciudad imputada en varias causas.

En los seis años que tiene la cooperativa, relató Urtado, vivió en carne propia cómo la dirigente movía los hilos de los gobiernos peronistas de Walter Barrionuevo y Eduardo Fellner . «Ella manejaba los municipios, la policía, la salud. El gobernador no existía. Esta mujer hacía y deshacía todo cuando quería«, se quejó.

La cooperativa que preside Urtado recibió amenazas de la gente de Tupac Amaru para que se afilie a la organización y así poder recibir los recursos para obras y la ayuda social que le correspondían pero que, en realidad, nunca le llegaban por orden de Sala.

Es que esos recursos iban del gobierno directamente a ella. El cooperativista lo explicó así: «Somos 500 personas y nos daban, cada tanto, 150 bolsones. La plata para construir viviendas nunca llegaba, y eso que nosotros no tomamos obras millonarias. Cuando le fui a reclamar a la ministra Adriana Magdaleno (la titular de Desarrollo Social durante el gobierno anterior), me decía que hable con Milagro Sala, ¿me entendés lo que te digo?».

Con expectativas por la regularización de las cooperativas que impulsa el gobierno radical, Urtado intenta dejar atrás los años de amenazas y maltratos. Pero él espera algo más: «Queremos sentir el anhelo de todo cooperativista, que es hacer una vivienda y entregarla a los compañeros. Nosotros no sabemos cómo se siente».