Martín Vivanco. Ser o No ser…

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Semanalmente, aparecen una serie de reuniones o eventos, o una cartelera de actividades  insertas  en un programa que tiene el propósito de atraer el turismo, naturalmente y como se anuncia  con variedad de intereses , se hace hincapié en Areco y la tradición.

Hago un paréntesis aquí, para explicar porque escribo o para que; en primer lugar lo hago por mí mismo , por soltar al aire mi opinión, canto como canta el gallo , sin obligación ninguna pero respondiendo a un instinto natural; opino como vecino, hablo desde mi esencia americana, me alarmo y me preocupa el ya no ser !!

El ya no ser , o no saber que se es o que somos; que queda o que fue de aquel orgulloso pueblo insignia de la provincia y la Nación. Y además escribo por la generosidad de los espacios que me dan algunos de mis amigos periodistas o editores.

Cerrado el paréntesis, volvamos al principio.

El devenir diario y la vida cotidiana  nos adormecen en ciertos aspectos, como en el ir de semana en semana sin darnos cuenta del transcurso del tiempo, sucede así, es como una canoa que en su continuo bogar ignora las olas que vienen y van.

Y así va Areco , va como en un lento bogar despreciando la profundidad de su pasado . Lo hace porque ignora y desmerece un tiempo, una época y un modo de ser que lo prestigió.  Por supuesto que muchas de estas cosas no son ex profeso; es más, muchos creen estar contribuyendo y ser consecuentes con aquel tiempo cuando en realidad están desnaturalizando aquel  Areco que nos dejó este prestigioso legado. Yo espero que muchos amigos no se molesten, porque no van en son de crítica sino de corregir el rumbo.

Pienso que aquello que interesaba o valoraba una proporción importante de arequeros hoy ya no es la misma , no importa;, a los que no les interesa no van dirigidas estas líneas, van a los otros , a los que pareciera interesarles , aunque sea , vaya redundancia , por interés !

Me pregunto? , Areco quiere ser un lugar tipo Tomas Jofré , o Lujan ?

Queremos recibir gente que nada le importa de nuestra Plaza, del Museo , de saber quién fue Juan H. Vieytes  , Jose Matias Zapiola o Don José Ruiz de Arellano?; que pase al lado de la placa que enumera los primeros pobladores con grado de ignorancia supina?; que nada le importe de cómo se realizó el Puente Viejo y que solo le interese echarse de panza para sacarle una foto cuando se entra el sol?.

Escuchar sistemáticamente , en relato hueco como dando categoría al lugar, se esté en lo Bessonart , en lo de Merti o en Los Principios  de voz del guía de turno: ¡ Acá venía Don Segundo !

Ver desfilar gente, que parece darle lo mismo comer acá que allá,  para luego al otro día tal vez marcharse. Digo: no nos avergüenza la cantidad de gente que ignora o no valora nuestros mejores méritos !, y no hacer nada !

Digo, ¿qué sentido tiene llenar “La matera “ con gente , que solo encuentra un lugar gratis para despejarse o salir un rato, si hay que pedir silencio , una y otra vez para escuchar al cantor de turno?.   Si “La matera no es un lugar de culto de nuestro pasado estamos perdidos, por más que tenga un locutor innecesario que hable ridículamente, de todas y todos .

A mis amigos músicos , monotemáticamente chacareristas,  los invito a revisar la selección de temas, les recuerdo: hace no mucho tiempo existieron Rufino Leguizamón , Tito Pérez, el Gordo Heredia, Quique Monserrat, Adolfo Guiraldes , Piquillín , Ricardo y Riojano Almonacid, Lito Lennon, Toto Althaparro, Cachito, Whelan,  Parreño, Omar Tapia, Don Carlos Tahilade , Martín Pereyra, y cuantos más !

Es muy pobre y dantesco el espectáculo de una chacarera tras otra.  Los músicos de Areco y  no otros, han decretado la muerte de los estilos, los términos , las cifras , las mazurcas , las polcas, etc.

Sería perdonable si no hubieran tenido de quien aprender pero… Con aquellos nombres ! .

Ah… les recuerdo:, en Santiago del Estero se toca la chacarera original , y en Salta la zamba.

Si se enojan , lo siento ,  por ahí pensándolo…

Por eso creo que si decimos que somos algo, debemos serlo de verdad y sino NO ! convenga o no,

Martín Vivanco