Según el relato de las personas que ayudaron en el rescate, un joven de unos 10 años fue clave para encontrar con vida a Alan Ruschel
«Un policía me dijo: ‘Usted es el primero en llegar, monte al niño en la camioneta y vaya a recoger los heridos'»»
En la camioneta de Marulanda, los rescatistas subieron a Ruschel, que estaba muy delicado, aunque igual intentaba comunicarse. «Lo subieron arropado, preguntó por su familia y sus amigos, dijo que le dolía mucho la cadera porque tenía una fractura», reveló Marulanda. El futbolista habló con sus salvadores en español, aunque lo justo y necesario. Pidió que le guardaran el anillo de compromiso para «poder casarse» y preguntó por sus amigos.
Hoy, a tres días del accidente, Ruschel permanece en cuidados intensivos, donde le han practicado diferentes análisis para determinar la gravedad de las lesiones sufridas en la columna. «Se le hizo una resonancia magnética que nos mostró una fractura en columna, pero que no presenta deterioro en su estado motor ni sensitivo», dijo Ana María González, directora médica de la clínica, quien más tarde señaló en Radio Belgrano: «Se encuentra hospitalizado en la unidad de cuidados intensivos, crítico pero estable, y con estado reservado».
Hoy, Ruschel pelea por su vida gracias al niño «fantasma» que apareció en el momento más oportuno.