Marcelino Zarate, un jubilado de San Antonio de Areco, hace unos meses había sufrido un ACV y la última vez que se lo vio había salido a hacer compras.

Despues de cinco días de búsqueda, la Policía Bonaerense encontró el cuerpo sin vida de Zárate muy cerca de donde había sido visto por última vez en la localidad de San Antonio de Areco.

Estaba sentado, entre pastizales, al lado de una zanja. El cuerpo estaba en buen estado. Se espera la autopsia de los peritos de la Policía Científica para determinar cómo murió el jubilado.

El lunes 25 de febrero, Marcelino salió de su casa ubicada en calle Martín Fierro N°17, con dirección hacia el kiosco para comprar un poco de pan, pero una cámara de seguridad lo registró a cinco cuadras del lugar, sobre la ruta provincial 31, próximo al campo donde el sábado los policías lo encontraron.

En los rastrillajes trabajaron más de 60 policías y bomberos con perros y drones, “pero muy pocos se metieron dentro de los pastizales», sostuvo Jessica, la nieta de Marcelino.

Jessica sostuvo que  esa misma noche se dieron cuenta de que el jubilado no volvía y de inmediato hicieron la denuncia en la comisaría de San Antonio de Areco.

«Mi abuelo había sufrido un accidente cerebrovascular (ACV), eso le provocaba algunas lagunas, posiblemente se extravió por eso», pensó su nieta. Marcelino se fue el lunes con $300, el DNI y el carnet del PAMI. El sábado lo encontraron tras cinco días, pero fue tarde.

El Intransigente